Ficha Técnica:
Autora: Svetlana Alexievich
Editorial: Debate
Sinopsis: Casi un millón de mujeres combatió en las filas del Ejército Rojo durante la segunda guerra mundial, pero su historia nunca ha sido contada. Este libro reúne los recuerdos de cientos de ellas, mujeres que fueron francotiradoras, condujeron tanques o trabajaron en hospitales de campaña. Su historia no es una historia de la guerra, ni de los combates, es la historia de hombres y mujeres en guerra.
¿Qué les ocurrió? ¿Cómo les transformó? ¿De qué tenían miedo? ¿Cómo era aprender a matar? Estas mujeres, la mayoría por primera vez en sus vidas, cuentan la parte no heroica de la guerra, a menudo ausente de los relatos de los veteranos. Hablan de la suciedad y del frío, del hambre y de la violencia sexual, de la angustia y de la sombra omnipresente de la muerte. Alexiévich deja que sus voces resuenen en este libro estremecedor, que pudo reescribir en 2002 para introducir los fragmentos tachados por la censura y material que no se había atrevido a usar en la primera versión.
Comentario:
La
Guerra no tiene rostro de mujer, escrito por Svetlana Alexiévich, ganadora del
premio nobel de Literatura 2015. Es un libro que nos muestra mediante
testimonios las vivencias de las mujeres rusas que participaron en la segunda
guerra mundial. Toma cada una de las aristas de las soldados como feminidad,
vida familiar, implicancia social, psicológica y amorosa, por lo que logra
hacer cada detalle más real aún
La
autora logra combinar el lado periodístico con el literario perfectamente,
utilizando fuentes concretas y sin perder la objetividad de su escritura. Al
principio nos cuenta como fue su camino en la recolección de datos, encontrar a
personas que deseen hablar sobre un tema doloroso en sus vidas y tener una
amplia cantidad de perspectivas para así abarcar el mayor escenario posible.
La
lectura es muy rápida, cada testimonio es distinto entre sí, lo que hace que
sea mucho más interesante seguir leyendo. En ningún momento se hace repetitivo o
tedioso. Es un libro que tiene mucha crudeza en sus testimonios y la autora no
intenta eliminarla, debido a que esa “crudeza” es propia del ambiente de guerra
que se vivía.
Lo
que más llama la atención es como les afectó a las mujeres desde el punto de vista
de “lo femenino” cuando perdían sus largas cabelleras en el momento en que eran
reclutadas, cuando sus cambios biológicos eran retrasados, la falta de
indumentaria (ropa, zapatos, cascos) a medida y ese sentimiento de sentirse
soldados en vez de mujeres.
“En
nuestra unidad había muchas chicas guapas…Fuimos a los baños, había una
peluquería allí mismo. Todas nos teñimos las cejas. El comandante nos echó un
buen polvo ¿Habéis venido a luchar o a ir a un baile”
Svetlana
se convirtió en la voz de muchas mujeres que fueron a la guerra, pero que su
labor no fue reconocida, sino que, al contrario, la mayoría fueron marginadas
por la sociedad machista de la época. Mediante su libro logra entregarle la
condecoración que merecen por haber sido valientes y pioneras en el mundo
militar.
También
el libro nos relata, lo difícil que fue para ellas entrar en un mundo que
antiguamente era exclusivo de hombres y la proeza de estas mujeres, de
atreverse a pesar de los riesgos, con tal de defender a su nación en guerra.
El
periodismo y la literatura son herramientas que al unirse pueden crear una
narración perfecta acompañado del realismo necesario. La autora nos demuestra
que es posible, que se pueden contar historias escondidas mediante la unión de
estas dos materias y el resultado es atrapante y fenomenal.
Este
libro hace justicia a las muchas mujeres que sacrificaron sus vidas y años de
su vida por su país. Nos demuestra que el territorio militar no es exclusivo de
hombres y que para la ganar una guerra es importante trabajar en conjunto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario